De conformidad con la terminología internacional derivada de la Convención sobre la Diversidad Biológica (1992), los recursos genéticos hacen referencia al material genético de valor real o potencial. Por «material genético» se entiende cualquier material de origen vegetal, animal, microbiano o de otro tipo que contenga unidades funcionales de la herencia. Los recursos genéticos forman una parte esencial de la diversidad biológica y su protección ha sido fuertemente reiterada en el Protocolo de Nagoya (2010).
Cabe destacar que se encuentran habitualmente asociados a los llamados «conocimientos tradicionales», que son propiedad colectiva de los pueblos originarios, y que se transmiten de una generación a otra, siendo reinterpretados por cada nueva generación.